www.educacionyliteratura.com

Las aulas del siglo XXI

El canto de la tórtola

Un libro de Carmen Soledad García Gutiérrez

ANORMALIDAD

Inútil normalidad. 
Respiración entrecortada.
Miradas fijadas
en la atrocidad humana.

¿Por qué guardáis silencio?
¿Por qué os hacéis cómplices del miedo?
Necesitamos recobrar el pulso de la vida
el armónico canto de los pájaros
la sonrisa contagiosa del niño
el maullar suave de un gato.

Recobremos el sonido acompasado
de las olas que llegan tímidamente
a la orilla
¡y mueren!
¡Y mueren! Acariciadas
por la arena cálida y fina.
Inútil normalidad.
Respiración entrecortada.
Miradas fijadas
en la atrocidad humana.

MUDOS

¡Qué mañana tan bonita,
En la vieja ciudad del Sol!
Han estado…
Mudos los hombres.
Mudo el silencio.
Mudo el amor.

Muda la mañana.
Mudo el campanario.
Muda yo.
Mudo tú.
Mudo él.
Mudos todos.
Mudo el horror.

Encorajado el sometimiento,
adiestrado el corazón.
Aniquiladas las esencias,
del llamado pensador.

Muda la inteligencia,
mudos los esfuerzos,
muda la ilusión.

Todo quieto, muerto, mudo,
acostumbrada desazón.
De gentes hipnotizadas,
de espíritu consumidor.
Mudas sus miradas,
mudo su entorno alrededor
Muda yo.
Mudo tú.
Mudo él.
Mudo el horror.

Todo quieto, mudo, muerto,
Y en mi pluma un resplandor. ¡Transformaré el silencio en griterío! Y en canto ensordecedor.

Mudo tú.
Muda yo.
Mudos todos…
Mudo el dolor.

KAMIKAZE

Déjame ser kamikaze
de los grandes pensamientos.
Déjame ser mariposa,
Volando alrededor de los sueños.
Déjame seguir la pista
de los pasos firmes y serenos.

Déjame ser perfume
de un frasco abierto y repleto.
Y desprender con el aroma
el despertar de este milenio.
E impregnar con unas gotas
el olor del universo.

Déjame ser kamikaze
para poder vencer el miedo,
Y el dolor que me produce
tanto cuerpo sin aliento.
¡Déjame, déjame, déjame!
Ser libre
como lo es el viento.